Será la última superluna se que vea en el 2020 y por cuarto mes consecutivo. Esta noche no te puedes perder la llama Luna de las flores, que será ligeramente más grande y brillante de lo normal y que seguro provocará suspiros.
Sin embargo, la Luna de las flores -expresión de origen norteamericano para referirse a Luna llena de mayo- no será tan brillante como la que tuvo lugar el 7 de abril, la cual coincidió con el perigeo, o punto más cercano entre ambos cuerpos planetarios.
En mayo, aunque el satélite terrestre ya ha comenzado a alejarse, aún se encuentra en el umbral del 90% del máximo acercamiento, por lo que, según la NASA, puede considerarse que habrá superluna. El término, acuñado por el astrólogo estadounidense Richard Nolle en 1979, no tiene mayor interés científico, al margen de señalar el ligero aumento de brillo y tamaño aparente del disco lunar sobre el firmamento.
La expresión Luna de las flores, que ha hecho fortuna en los últimos años, es originaria de las culturas nativas de Estados Unidos, y fue recogida por el popular Almanaque del Viejo Granjero (Old Farmer’s Almanac). Sin embargo, tal y como indica esta fuente, la denominación varía de unas tribus a otras. Otros nombres son la Luna de la madre, de la leche o de la siembra de maíz, siempre en referencia a una época del año vinculada a la fertilidad y el florecimiento.
El leve aumento de brillo y tamaño provocado por la superluna tendrá una contrapartida para los aficionados a la astronomía que estén en condiciones de contemplar el cielo estos días. El motivo es que la lluvia de estrellas Eta Acuáridas está alcanzando su máxima actividad durante estas noches, justo cuando la luz de la Luna llena empeorará su visibilidad.
