El Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) indicó que una forma de usar los grandes bancos de sargazo que recalan en las playas de la región, sería como combustible para generar energía eléctrica.
El director de ese centro de investigación, Pedro Iván González Chi, explicó en entrevista que se trata de un material que puede quemarse con mucha facilidad y, por ende, puede generar energía como lo hacen otros productos combustibles.
Sin embargo, para ello también se requerirían de estudios e inversiones para desarrollar un sistema que permita su aprovechamiento de manera correcta para no generar contaminación, aunque en definitiva la quema de sargazo es mucho menos contaminante que el carbón y de los derivados del petróleo.
“Es una solución simple, pero que requiere de inversiones y garantizar que habrá sargazo suficientemente disponible para darle ese uso y que la inversión es rentable”, precisó.
Expuso que el origen del sargazo que hoy impacta al Caribe mexicano, no es nacional, “ese sargazo no se produce en nuestros litorales”.
“El problema tampoco es un problema nuevo, y es un problema internacional, pues las algas viajan miles de kilómetros y llegan a nuestras costas después de un largo viaje por el Atlántico y el Golfo de México”, dijo.
Por eso lo ideal sería empezar a coordinar esfuerzos entre todos los sectores afectados y buscar soluciones e, incluso, alianzas con otros países para evitar de manera paulatina, que el sargazo llegue a las playas e inicie su proceso de descomposición, añadió.
También es recomendable empezar desarrollar soluciones científicas que permitan darle uso al sargazo, como pueden ser fertilizantes o como una fuente de combustible alternativa para generar energía, como se mencionó al principio.
Indicó que desde hace años, el CICY experimenta con sargazo para un posible uso como fertilizante y para la producción de hongos comestibles, y uno de los principales retos es conseguir el material idóneo.
“No todo el sargazo sirve, hay muchas variedades y algunas de éstas son capaces de acumular grandes cantidades de metales pesados que son peligrosos para la salud humana, por eso hay que hacer una selección, y esa selección es casi imposible hacerla cuando el material empieza a descomponerse.
Una vez que inicia la descomposición, lo ideal sería usarlo como combustible para generar energía, pero en cualquiera de los casos se requiere de una buena inversión de recursos económicos, humanos y materiales que no se ha hecho hasta ahora, precisó el especialista.
Por ahora, las grandes manchas de sargazo han pasado de largo de las costas yucatecas, gracias a las corrientes del Golfo de México, que las han alejado hacia La Florida, en Estados Unidos, y las playas de la entidad lucen prácticamente limpias en comparación con las de la zona del Caribe mexicano.
Fuente: Notimex.