Por: Martha D. Chan
Izamal, Yucatán a 15 de agosto de 2017.- Aunque no se descartó para el próximo proceso electoral, la titular de la Sedatu Rosario Robles Berlanga, dijo que lo único que le interesa es seguir trabajando todos los días, mientras le siga dando la oportunidad el presidente Enrique Peña Nieto.
En breve opinión de 35 segundos a los medios de comunicación porque alegó no tener tiempo (acudiría a un almuerzo), Rosario Robles se retiró en calesa acompañada del gobernador Rolando Zapata Bello rumbo al restaurante Zamná del propiedad de William Sosa Altamira, delegado de la Sedatu en Yucatán.
Lo anterior después de encabezar el evento en Izamal sobre la entrega de 4,423 de acciones de vivienda: un cuarto más o un cuarto rosa, que tuvieron una inversión de $198, 813, 850. 00.
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-Cómo siempre y cómo lo dije aquí, hay absoluta libertad y no hay ningún condicionamiento de los programas sociales del presidente Enrique Peña Nieto-, respondió sobre el blindaje electoral que habrá en las próximas elecciones.
Al ser cuestionada sobre si le interesa la candidatura para el 2018, respondió que no le interesa.
-No, me interesa seguir trabajando por la gente todos días, mientras le siga dando la oportunidad el presidente Enrique Peña Nieto-, expresó la funcionaria federal, quién no milita en el PRI.
Asimismo, durante esa ceremonia en donde asistieron diversos funcionarios estatales y de Izamal, ciudad que poco después de las 13:30 horas el termómetro marcaba más de 38 grados centígrados bajo la sombra del Sol, los miles de personas de condición humilde que acudieron prácticamente se deshidrataban.
Ante ello, a pesar de que daban sus discursos los funcionarios abandonaron poco a poco sus lugares, debido a que ni los gigantes ventiladores que instala el Gobierno del Estado eran suficientes para mitigar el calor y el hambre que sentían, después de las 15 horas.
Sin embargo, muchas de las personas, principalmente amas de casa y personas de la tercera decidieron hacer largas para recibir un plato con cuatro tacos de cochinita y un refresco embotellado, «cortesía» del Ayuntamiento de Izamal.
