
Aunque el guacamayo de Spix fue declarado extinto, hoy vuelve a dar señales de vida.
Gracias a programas de cría, reintroducción y a la popularidad que ganó con la película Río, algunos ejemplares fueron preservados y liberados en su hábitat natural en Brasil.
Aún queda mucho por hacer, pero este esfuerzo demuestra lo valioso que es proteger la biodiversidad y dar una segunda oportunidad a las especies en riesgo.