La Fiscalía de Estados Unidos acusó por primera vez a una ciudadana mexicana por dar apoyo material a una organización terrorista, en contra de María del Rosario Navarro Sánchez, a quien acusan de ayudar al Cártel Jalisco Nueva Generación para obtener armas de fuego y granadas, y en operaciones de tráfico de drogas y de personas.
Dicha acusación es historica porque representa el primer caso en el país que imputa a una persona por colaborar con una organización de este tipo a través del respaldo logístico y operativo a un cártel mexicano.
En septiembre de 2023 fue acusada por primera vez, por conspiración para traficar drogas, tráfico de armas de fuego y tráfico de dinero en efectivo para el CJNG, en la Corte de Distrito Oeste de Texas.
El 16 de mayo pasado, la fiscalía para el Distrito Oeste de Texas anunció una nueva acusación, en la misma corte, que incluye un cargo por proveer apoyo material a una organización terrorista extranjera designada, con base en la orden presidencial del presidente Trump en contra de varios cárteles mexicanos, entre ellos, el Cártel Jalisco.
Según los documentos judiciales, Navarro-Sánchez habría conspirado para proveer armamento, específicamente granadas, al CJNG, además de participar activamente en una red de tráfico de personas, armas de fuego, narcóticos y contrabando de efectivo a gran escala.
Junto a ella también fueron imputados Luis Carlos Dávalos-López, de 27 años, y Gustavo Castro-Medina, de 28, ambos mexicanos, por diversos cargos relacionados con tráfico de armas, drogas y personas.
