El Papa León XIV ha expresado su deseo de viajar a México, y uno de sus destinos soñados es la Basílica de Guadalupe.
Obispos mexicanos han manifestado públicamente este anhelo, planteando ya una invitación para que su Santidad participe en las celebraciones guadalupanas, especialmente rumbo a los 500 años de la aparición.
En su mensaje al Congreso Nacional Misionero, el Papa destacó la presencia mariana de Guadalupe como símbolo misionero y de unidad para México.
¿Qué implicaría su visita? Más que un signo de fe, podría fortalecer el vínculo de la Iglesia con México y poner a la Virgen como puente de esperanza para miles de fieles.
