Pustunich, Yucatán, 8 de marzo de 2017.- Landy, Martha, Rubí y Rosa son un ejemplo de que cuando se trabaja con esfuerzo y dedicación se pueden cosechar más y mejores frutos para el bienestar de su familia.
Las cuatro hermanas, beneficiarias del Programa de Producción Social Familiar de Traspatio, han aprendido a trabajar la tierra de la que crecen rábanos, lechuga, cilantro, chile habanero y otras hortalizas que consumen y también venden.
De esta manera, obtienen un ingreso extra al de su empleo como trabajadoras domésticas y sacan adelante las necesidades de su hogar, en el cual también vive su papá, don Abelardo Cua, que debido a su edad ya no puede trabajar.
El titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Mauricio Sahuí Rivero reconoció el esfuerzo de las manos trabajadoras de mujeres yucatecas como las de Pustunich que demuestran cada día con el valor de su esfuerzo su ímpetu de llevar mejores condiciones de vida a sus familias.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, el funcionario estatal subrayó que constatar de manera personal lo que ellas pueden hacer con sus huertos de traspatio motiva al Gobierno del Estado a fortalecer estos esquemas donde se empodera la fuerza productiva femenina que son el pilar de cada hogar.
«El Gobernador Rolando Zapata Bello sabe del valor del trabajo de las mujeres, son ustedes quienes hacen que los programas sociales sean aprovechados por las familias y los apoyos tengan un buen fin. En pocas palabras, son las principales aliadas de la política social» manifestó.
De gira de trabajo por Ticul donde se impulsan 40 huertos de este esquema productivo y apoyo a la economía familiar, Sahuí Rivero también visitó a María Guadalupe Cua Segura que a un año de haber iniciado con este proyecto en un espacio a un costado de su vivienda ya tiene una mejor producción que le permite vender sus hortalizas y tener un dinero para contribuir a los gastos de su casa y sus dos hijos de 13 y 4 años que están en la escuela.
«Yo antes sembraba solo yerbabuena, cilantro, cebollina, pero con este apoyo pude cosechar rábano, tomate, chile habanero, también hay repollo y estoy muy contenta porque así yo puedo ayudar en mi casa a mi marido y que entre los dos saquemos adelante a nuestros hijos», refirió.
Sahuí Rivero destacó que estos testimonios permiten a las autoridades solicitar más apoyos, por lo que se comprometió a seguir trabajando para el desarrollo de la mujer.
«Al ver estos huertos prósperos nos dan la ventaja de poder gestionar para que hayan más recursos para impulsar este tipo de acciones con las que puedan darle de comer a la familia, que puedan venderlo y que en combinación con la cría de sus aves de traspatio tengan un impacto en su economía y que la labor de la mujer, junto con su esposo y familia permitan enseñar que esa actividad vale la pena realizarla», puntualizó.
