A través de redes, un joven compartió su historia de superación y agradecimiento a quienes le compraron globos cuando los vendía en la calle, pues gracias a ello logró graduarse como contador.
Se trata de Eduardo Chamé, quien logró egresar de esta carrera en la Universidad Autónoma de Chiapas
“Agradecer a todos los padres que alguna vez han comprado globitos a sus hijos, gracias a ellos pude pagar mis pasajes, inscripciones, libros, alimentos y que sin saberlo me estaban ayudando a cumplir mis metas”, compartió en redes sociales.
Además, apuntó a quienes a todos los que se burlaron de él por su trabajo, que “los vendedores ambulantes somos personas que también tenemos sueños, que estamos forjando nuestro futuro, por ello hay que respetar y valorar el trabajo por muy humilde que sea, porque más adelante ese vendedor al que hoy rechazas será el profesionista que mañana tu puedas necesitar”.
Información de Con Acento.