Debido a los datos arrojados por el último censo poblacional en China, las autoridades anunciaron la reforma a la política de natalidad, permitiendo de esta manera a todas las parejas del país tener hasta tres hijos.
La política de los dos hijos impuesta en 2016 marcó un descenso en los índices de natalidad del país oriental, por lo que las autoridades decidieron acabar con ella mediante esta reforma, la cual busca ser un revulsivo ante el problema de rápido envejecimiento que amenaza con presentar graves problemas sociales y económicos en un futuro próximo para la nación.
El politburó del Partido Comunista encabezado por el presidente, Xi Jinping, decidió este 31 de mayo adoptar la medida para abordar el problema cada vez más grave del envejecimiento poblacional.
Mediante un comunicado, informaron que esta reforma “ayudará mejorar la estructura de la población China” y también sugieren la aprobación del aplazamiento de la edad jubilación o la realización de campañas de educación sobre el matrimonio.
Actualmente la tasa de fertilidad en China es de 1.3 hijos por mujer, un número inferior al 2.1 necesario para mantener estable a una población.