Gloria Carolina Cházaro Berriel, teniente de Fragata del Cuerpo General de la Secretaría de Marina, se convirtió en la primera mujer al mando de una patrulla costera, con lo que se abre una brecha a las nuevas generaciones “e impulsa el liderazgo y empoderamiento de las mujeres navales”, señaló la dependencia.
La teniente es la Segunda Comandante de la Patrulla Costera ARM “Bonampak” (PC-339), cuyo eslogan es “Eficiencia y rapidez en el mar territorial”, la cual zarpó ayer del puerto de Mazatlán, Sinaloa, con la misión de colaborar en el mantenimiento del estado de derecho en las áreas protegidas del Archipiélago de Islas Marías.
Carolina Cházaro tiene la función de ejercer el mando, así como ejecutar de manera eficiente las operaciones que se le asignen.
La mencionada patrulla costera tiene 15 elementos de tripulación y la misión de realizar operaciones de vigilancia, interdicción, disuasión, búsqueda, rescate, salvamento y combate a ilícitos.
La Secretaría de Marina informó que la teniente es egresada de la Heroica Escuela Naval Militar, donde se graduó con honores siendo el primer lugar de su generación, se ha desempeñado como Oficial de Navegación, jefa del Departamento de Armamento en una Patrulla Oceánica y Comandante de una Patrulla Interceptora de la Armada de México.
En 2018 obtuvo una beca para estudiar durante un año la maestría en seguridad y estrategia aplicada, en la Universidad de Exeter del Reino Unido.
A su regreso a México se incorporó a laCuarta Zona Naval con sede en Mazatlán, donde pertenece a la Octava Flotilla, siendo designada como Segundo Comandante.
“La Secretaría de Marina-Armada de México extiende un reconocimiento a la teniente Cházaro Berriel por este logro conseguido al hacer historia en esta institución y celebra la labor de las mujeres navales, quienes con valentía y determinación viven todos los días al servicio de la Patria y son parte fundamental de la Gran Familia Naval”, informó la dependencia.
La institución castrense mencionó que esto enorgullece a la Semar como parte de la cultura de igualdad sustantiva entre hombres y mujeres que se promueve, con el fin de impulsar la perspectiva de género, prevenir de manera constante la violencia y fomentar el respeto irrestricto a los derechos humanos.