Pug, French Poodle, Chihuahua y Schnauzer son algunas de las razas preferidas de una banda secuestradora de perros en la capital yucateca.
La Policía Estatal Investigadora (PEI) sigue los pasos de estos maleantes que piden una recompensa para que los propietarios de los canes recuperen a sus mascotas.
Por lo menos existen 30 denuncias contra estos malhechores, pero no se descarta que existan más afectados.
Se cree que son grupos organizados que, como si se trata de personas, organizan un plan para secuestrar a los animales y si no acceden a sus pretensiones posteriormente ofertan los ofertan en internet.
Hasta donde se sabe, han perfeccionado su plan de secuestro al grado de estudiar a sus víctimas, la capacidad económica de sus víctimas y generan ansiedad en los dueños para que suelten rápido el dinero.