
El subsidio de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que ayudó a reducir los pagos de energía en la Península de Yucatán llegó a su fin. Desde el 1 de octubre, los recibos volverán a calcularse con la tarifa normal, lo que significa un aumento en el costo de la luz para miles de familias.
Este apoyo se aplicó entre mayo y septiembre de 2025, con el objetivo de aliviar la economía familiar en la temporada de más calor, cuando el uso de aires acondicionados y ventiladores dispara el consumo eléctrico.
Aunque esta medida representa un respiro temporal, el final del subsidio llega justo en la recta final del año, cuando los gastos crecen por las fiestas decembrinas y el uso de adornos, luces y aparatos.
La CFE recordó que este beneficio también aplica en otros estados con climas extremos, tanto en el sureste caluroso como en regiones del norte donde las bajas temperaturas obligan al uso de calefacción.
Ahora toca programarse y cuidar el consumo, pues el recibo de luz volverá a reflejar el gasto real sin descuento.