La playa de Drakes Beach amaneció cubierta por miles de estos animales. Según los expertos, las lombrices fueron arrastradas del fondo marino por una tormenta y lanzadas a la playa.
Estos animales sin dientes, que habitan en aguas poco profundas, pueden llegar a medir hasta 30 centímetros y algunos ejemplares vivieron hasta los 25 años. Su única extremidad, que tiene forma de espátula, les permite alimentarse y nadar.
Habita en aguas poco profundas en la costa entre Oregón y Baja California en Estados Unidos, y de acuerdo a los especialistas citados en la revista BayNature, la extraña situación pudo deberse a que una tormenta los hizo salir de sus madrigueras submarinas para terminar en la arena.
Esta especie, considerada inofensiva y en países como Corea, Japón y China, la criatura suele comerse cruda o a la parrilla con sal y aceite.
En China, el animal es también usado como remedio para enfermedades de la columna y el riñón, y hasta como un vigorizador sexual.