AUSTRALIA, A 3 DE FEBRERO DE 2017.– ¿Nunca escuchaste a un familiar decir que tomaría una siesta de ‘20 minutos’, o incluso menos? Y uno, sobre todo cuando estaba en pueril edad, se cuestionaba cómo era posible que alguien se sintiera más que descansado con dormir tan poco tiempo: pues resulta que una modorra de ese tipo es lo que necesitamos para aumentar la productividad.
David Hillman, director de la australiana Sleep Health Foundation, con sede en Blacktown, Nueva Gales del Sur, indica que un descanso de 20 minutos, evitando caer en el sueño profundo, sería la optativa más viable para las suplir las pérdidas que genera la falta de sueño en un mundo interconectado veinticuatro horas, los siete días de la semana.
Agregó que, si el descanso se extiende, naturalmente, es más benéfico para el cuerpo, pero algunas personas tardarían el doble del tiempo en despertarse; David Hillman abundó en que la falta de sueño trae consigo significativas repercusiones económicas, como lo indica un informe de 2014 de la consultora Deloitte Access Economics; tan sólo para Australia:
Las pérdidas anuales para la economía sumaban tres mil 853 millones de dólares”.
En este sentido, se resalta que organizaciones como Google, KPMG, BHP Billiton e iSelect se preocupen… y se ocupen por implementar salas para siestas en sus instalaciones laborales; asimismo, una empresa neoyorquina diseña confortables y estéticos sillones que permiten a su usuario siestas de 20 minutos en la posición de gravedad cero.
Además, el mueble de descanso posee programación de luces y vibraciones para relajarse; el diseño clásico será cobijado con forrajes blancos y grises, y, si así lo desea el cliente, se puede solicitar el color de su preferencia, para hacerlo combinar con el ambiente del trabajo, señala la publicidad.