Rosie, la gata más vieja del mundo, falleció a los 33 años de edad, informó su dueña Lila Brisset.
La “michi” nació en 1991 en Norwich, Reino Unido y ostentaba el título no oficial del «gato más viejo del mundo», ya que el título oficial pertenece a Flossie, una gata de 28 años.
El récord del gato más viejo de la historia sigue perteneciendo a Creme Puff, de Austin, Texas, que vivió 38 años y tres días, falleciendo en 2005.
Fotos: Clarín.
Información de Con Acento.