El módulo de aterrizaje inteligente para investigar la Luna (SLIM) de Japón logró funcionar tras dos semanas de haber llegado al satélite.
SLIM sobrevivió a una helada noche lunar, es decir, en su aterrizaje quedó inclinado, dejando sus paneles solares sin acceso directo a la luz solar, lo que no permitía recargar sus baterías.
Sin embargo, según la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA), el ángulo del sol cambió de una manera que permitió a SLIM recargarse, se despertó después de dos semanas y restableció la comunicación con la Tierra.
El módulo lunar aterrizó el pasado 20 de enero y sobrevivió a temperaturas de hasta -133 grados Celsius.
Foto: @SLIM_JAXA.
Información de Con Acento.