La zona arqueológica de Chichén Itzá cumple una semana de no recibir a visitantes y turistas, por el bloqueo que se realiza en carreteras y accesos que llevan al sitio por manifestantes.
Por su parte el Instituto Nacional de Antropología e Historia ha instalado una mesa de diálogo y ha señalado que se mantiene respetuoso de la protesta; sin embargo aún no se han alcanzo acuerdos.
El bloque que impide el acceso a turistas ha provocado ya perdidas a personas que dependen del turismo en la Zona Arqueológica de Chichén Itzá, registrando pérdidas de hasta el 12 millones de pesos en sólo esta semana, de acuerdo a cifras no oficiales.
Fue el pasado lunes 2 de enero, cuando comerciantes y ejidatarios de diferentes poblados comenzaron la protesta exigiendo la devolución de tierras ejidales y el despido del director de la zona arqueológica, Marco Antonio Santos Ramírez, a quien acusan de atropellos contra su trabajo al querer ubicarlos fuera del sitio arqueológico.
Por su parte, el INAH asegura que este reordenamiento son para brindar mejor servicios a los visitantes, quienes asegura sufren del acoso de parte de vendedores y prestadores de servicios turísticos.
Información de Con Acento.