Un joven de 26 años fue detenido en Asti, noroeste de Italia, acusado de falsificar un Ferrari F430 que construyó artesanalmente a partir de un coche de la marca Toyota, al que le modificó la carrocería y la apariencia exterior.
Por falsificar uno de los símbolos «más apreciados del estilo italiano en el mundo», la policía lo detuvo hace unos días en un control rutinario y presentó el caso como la «Operazione Cavallino».
El aparente Ferrari, que imitaba el diseño del modelo «Pininfarina» producido entre el 2004 y 2009, ha sido confiscado por las autoridades, que han denunciado al propietario ante la fiscalía por el «uso no autorizado de marcas registradas».