El Thaipusam se celebra en varias ciudades de Malasia y especialmente en Kuala Lumpur, la capital, donde reúne alrededor de un millón de personas para dar las gracias y mostrar su aprecio a Murugan hijo del Dios Shiva.
La ceremonia consiste en entregarse en cuerpo y alma para rendir penitencia por los pecados. Los devotos participaron del festival lavando sus cuerpos, practicando abstinencia, rasurando su cabeza e incluso perforándose y caminaron hacia los 272 escalones que suben al templo de Batu.
El peregrinaje termina una vez llegan a la Cueva Batu (a las afueras de Kuala Lumpur) y hacen su último baile con las energías que les quedaran después del duro día. Esta tradición se celebra cada año en Malasia, en la India (en el sur, Tamil Nadu) y en Singapur entre enero y febrero y dura 3 días.
Foto: Roslan RAHMAN / AFP