El empresario Luis Oswaldo Espinoza Marín, originario de Jalisco, se suicidó tras confesar haber incurrido en el delito de fraude.
Mediante un video el dueño de Asesores Jurídicos Profesionales (AJP) reconoció que derivado de la pandemia de COVID-19, en los últimos cuatro meses no pudo cubrir las prestaciones que había contraído.
«Sobrehipotequé los inmuebles que con fruto de sus inversiones adquirí. Actualmente ya no puedo seguir adelante, todo el dinero que me dieron en inversiones está invertido en bienes raíces que están hipotecadas”, aceptó.
Espinoza Marín dijo que suplicó a su esposa que le firmara hojas en blanco para posteriormente él manejar dichos documentos a su conveniencia, si bien enfatizó que su mujer no es responsable de ningún delito.
La Fiscalía del Estado de Jalisco recibió denuncias por el delito de fraude, de 130 presuntas víctimas de Asesores Jurídicos Profesionales.
Como parte de las indagatorias este sábado 6 de agosto se llevó a cabo un cateo en el domicilio del empresario, en el municipio de Zapopan.
Al llegar a la finca policías de Investigación fueron recibidos con disparos por arma de fuego, pero una vez que lograron ingresar a la propiedad encontraron a Luis Oswaldo Espinoza muerto junto a un arma de fuego, una nota póstuma y una identificación oficial.
Asimismo se ejecutó otro cateo en un domicilio de la colonia Ladrón de Guevara en Guadalajara donde se aseguraron diversos documentos que se integrarán a la investigación abierta.
Se presume que algunas víctimas del fraude perdieron más de 22 millones de pesos.
Con información de Milenio