Al condicionar seguir con el programa “Agua Saludable para La Laguna” -que busca garantizar el suministro de agua limpia a la región- solo si se retira antes del 3 de octubre el amparo que se ha interpuesto y que evita que el proyecto siga, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que desconfía del Poder Judicial pues lo acusó de estar podrido, y que los jueces, ministros y magistrados están al servicio de grupos de intereses creados y que tienen una mentalidad ultraconservadora.
Acompañado por José Rosas Aispuro y Miguel Riquelme, gobernadores de Durango y Coahuila, respectivamente, quienes respaldaron la propuesta del gobierno federal, el titular del Ejecutivo federal emplazó a que el próximo domingo 3 de octubre se defina entre productores, habitantes y ambientalistas si se inicia el proyecto para que se retiren los amparos, pues manifestó que “el Presidente de México no puede ser rehén de personas o de grupos”.
“Y si ya empezaron los amparos pues no vamos a poder terminar la obra. ¿Ustedes creen que yo voy a confiar en el Poder Judicial? No me estoy chupando el dedo.
Desgraciadamente el Poder Judicial está podrido, hay honrosas excepciones para no generalizar, pero jueces, magistrados, ministros están al servicios de los grupos de intereses creados y tienen una mentalidad muy conservadora, ultraconservadora.