La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), negó la autorización en materia ambiental para el proyecto Central de Ciclo Combinado Mérida, promovido por Iberdrola.
En una resolución publicada en la Gaceta Ecológica, la Semarnat señaló que el proyecto incumple con diversas disposiciones en materia ambiental dispuestas en los programas de Ordenamiento Ecológico y Territorial de Yucatán, y el Municipal de Desarrollo Urbano de Kanasín, así como la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, informa el periódico La Verdad Yucatán.
El proyecto consiste en la construcción y operación de una central de ciclo combinado con gas natural como combustible, con una capacidad de generación de energía eléctrica neta máxima de aproximadamente 579.1 MW en el municipio de Kanasín, según se lee en la Medida de Impacto Ambiental (MIA), presentada por la compañía vasca a la Semarnat de México.
“Hablamos con los inversionistas, esa es la realidad, nos dicen que va, que han iniciado sus trámites y sus permisos, que ya ves que son un poquito dilatados en temas de energía, pero ellos dicen que Yucatán es el lugar, que han visto cómo está creciendo y cuánta industria está llegando”, resaltó el titular de la Secretaría de Fomento Económico y Trabajo (Sefoet), Miguel Herrera Novelo, cuando presentó la intención de la empresa por establecerse en Yucatán.
En ese momento, el funcionario estatal subrayó que Iberdrola es una empresa que tiene varias inversiones alrededor del mundo, por lo que su llegada a Yucatán es de suma importancia para la región sureste del país, ya que la inversión iba a ser de ocho mil 400 millones de pesos, en el municipio de Kanasín.
“En el tema de generación de energía saben que la península es deficitaria, necesita ese tipo de inversiones, en ese caso estamos hablando de una inversión extranjera de varios cientos de millones de dólares”, destacó Herrera Novelo.
Entre los elementos para la negativa, la autoridad ambiental señaló que la superficie del polígono donde se planteó el proyecto, que mide 31.2 hectáreas, se ubica en una región ecológica que presenta un escenario ambiental “inestable a crítico” hacia 2033.
Incluso, el proyecto carecía de una propuesta formal de programa de rescate y reubicación de flora y fauna, además de una propuesta formal de trabajos a realizar ya sea de restauración o rehabilitación para la etapa de abandono del sitio, aunque la Semarnat declaró que la empresa tiene el derecho de volver a promover el proyecto.
Esta negativa de permiso ambiental significa para Iberdrola un nuevo revés por parte del Gobierno de México, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, quien ha mantenido una campaña en contra de empresas privadas extranjeras.
Iberdrola comenzó con los trámites de este proyecto en las primeras semanas del año pasado. El 21 de enero de 2021, la Semarnat publicó el documento de solicitud de Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) en su Gaceta Ecológica, previo a que el Gobierno federal sometiera al Congreso de la Unión la iniciativa de reforma eléctrica que busca regresar el monopolio de la comercialización de energía eléctrica a la CFE.
Fuente y foto: La Verdad Yucatán
