En Brownsville, Texas se encuentra una secundaria que se asemeja a cualquier otra de Estados Unidos, mismo color de ladrillo, una bandera ondeante y autobuses escolares en su entrada; pero este lugar tiene un objetivo en particular, brindar educación a madres adolescentes.
Se trata de la escuela Lincoln Park, ubicada en este pueblo entre la frontera con México.
En este instituto el sonido de la campana se combina con el de los balbuceos, juguetes y llantos de los bebés.
El plan de estudios es exactamente el mismo que el de otras escuelas, la diferencia está en que hay una guardería, los autobuses escolares cuentan con asientos de seguridad y en los salones hay ropa de bebé para las madres que puedan necesitarla.
Además, las ausencias para las citas médicas están justificadas y pueden recoger el desayuno para ellas y sus hijos, todo de forma gratuita.
Casi todas las estudiantes de Lincoln Park, que ha atendido exclusivamente a madres adolescentes desde 2005, tienen entre 14 y 19 años.
La mayoría son de bajos ingresos y unas pocas son residentes mexicanas nacidas en Estados Unidos, que cruzan la frontera todos los días desde Matamoros, Tamaulipas, para asistir a clases.
Fotografías: BBC.
