Entre lágrima la señora Isa Cauich, de Oxkutzcab vivió una mala broma anoche, pues le encargaron 60 empanadas que nunca pasaron por el pedido.
A través de su Facebook, narró que por teléfono le hicieron un pedido grande de 62 empanadas, de manera que las preparó, pero al llamarle, al número teléfono donde se le encargaron mandó a buzón y jamás respondieron.
Ella es viuda y ha sacado adelante a sus hijos con su venta de antojitos en Oxkutzcab.
La afectada exhortó a no hacer ese tipo bromas, pues la economía es difícil y la inversión que se hace no siempre se recupera.
Algunas personas del pueblo y de redes sociales la apoyaron con comprarle algunas empanadas.
Información: Con Acento