Anastasia Pokreshchuk, de 32 años, es la joven ucraniana conocida como la mujer con las mejillas más grandes del mundo. Un reconocimiento que le ha costado años de intervenciones estéticas y más de dos mil dólares en material de infiltraciones, ya que es ella misma quien se las hace.
Su obsesión por los pómulos empezó a sus 26 años, cuando se hizo su primera infiltración. A día de hoy, se ha hecho tantas que ha perdido la cuenta. Aún así Anastasia todavía piensa que sus pómulos no son suficientemente grandes, y piensa seguir inyectándose los pómulos hasta conseguir el resultado deseado.
Antes de empezar a modificar su rostro, sus amigas se burlaban de ella diciendo que tenía apariencia de un “ratón gris”, según ha contado la joven en This Morning. Unas burlas que le crearon una inseguridad y razón por la cual decidió cambiar su aspecto.
En la actualidad la joven se siente a gusto con su físico, sin embargo, muchas veces recibe comentarios ofensivos de la gente: “Entiendo que parezcan raras para otras personas, pero no me importa. Pueden pensar que son demasiado grandes, pero yo creo que son un poco pequeños, necesito actualizarlos pronto”, explicaba en la entrevista.
La joven ha empezado a estudiar cosmética de manera virtual para aprender a ponerse bien las infiltraciones de ácido hialurónico, ya que los expertos advierten de los peligros que puede causar no acudir a un especialista.
Aunque los pómulos es la parte de su cara que más destaca y llama la atención, Anastasia también se ha sometido a tratamientos de bótox para la frente, remodelación de mentón y mandíbula e implantes en los pechos.
Sus seguidores en Instagram, a día de hoy puede afirmar que está contenta con su aspecto físico, y quiere alcanzar su meta de tener, algún día, el reconocimiento oficial de récord Guiness como la mujer con los pómulos más grandes del mundo.
Fuente: La Vanguardia