En una gasolinera de Morelia, “Peluchín”, un perrito callejero encontró un hogar y un trato excepcional.
Hace un par de años los empleados de la gasolinera lo adoptaron, lo informaron y ahora recibe atención y cuidado de alta calidad.
Incluso, hace cuando recién había sido adoptado lo “robaron”, pero lo devolvieron para seguir con su labor de “guardián gasolinero”.
Fotos: DepatadeperroVlogs
