Es importante que los adultos mayores sean conscientes de los riesgos que pueden enfrentar en la carretera al momento de estar conduciendo y tomen medidas para evitarlos, después de los 65 años, así lo dio a conocer la Universidad de Harvard en un estudio de campo.
Por ello, existen diversos factores que pueden hacer que un adulto mayor sea considerado un «conductor inseguro». Uno de ellos es la subestimación de sus capacidades detrás del volante.
Muchos adultos mayores continúan conduciendo incluso cuando han experimentado una disminución de sus habilidades visuales, motoras o cognitivas.
Además, las enfermedades relacionadas con la edad, como la pérdida de visión, la artritis o la neuropatía, pueden dificultar la concentración y la capacidad de reacción de los adultos mayores.