Para Orthmann su empleo es parte de la rutina, no hace planes ni se preocupa por el futuro. “Lo único que me importa es que mañana será otro día en el que me despertaré, me levantaré, haré ejercicio e iré a trabajar”, dijo a la organización del premio. La oficina es su lugar favorito y conseguir el Récord Guinness ha sido un gran logro, aseguró.
Según la empresa, él ha cobrado su salario en 9 denominaciones distintas y ha viajado en casi todas las aerolíneas comerciales en la historia de la aviación brasileña. Actualmente, tiene buena salud y excelente memoria.
Su secreto para el éxito laboral es encontrar una buena empresa y trabajar en un área que lo motive, según dijo a la organización de los récord mundiales.
Para Walter, batir un título de Guinness World Records es un honor y un privilegio. Nunca hubiera imaginado que lograría uno.
Fuente y foto: Portafolio