La Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), en apego a las recomendaciones emitidas por el Gobierno del Estado y dado el avance en el proceso de vacunación, informa que el retorno a clases presenciales a las escuelas Preparatoria Uno y Dos, así como a la Unidad Académica de Bachillerato con Interacción Comunitaria (Uabic), será conforme a lo previsto en el calendario académico a partir del próximo jueves 27 de enero, bajo los siguientes lineamientos:
1. Con el fin de proteger todo lo posible la salud de estudiantes, docentes y trabajadores administrativos y manuales, continuarán las medidas de prevención señaladas en los protocolos sanitarios que desarrollaron las facultades de Enfermería y Medicina, además de que seguirá la atención a los temas de logística establecidos por la Facultad de Ingeniería Química.
2. El regreso a las aulas se hará con un aforo limitado entre el 50 y 75 por ciento de su capacidad, de manera que cada escuela organizará los días, horarios y grupos de estudiantes que asistirán, comunicándolo de forma oportuna a través de sus respectivas páginas de internet y redes sociales oficiales.
3. Las áreas de tutorías de cada escuela revisarán los casos especiales de personas que presenten alguna comorbilidad o riesgo de salud, así como aquellas que tengan un diagnóstico positivo de COVID-19 o tengan algún familiar que habite en la misma casa con el mismo diagnóstico.
4. Al iniciar el segundo corte de calificaciones del período semestral previsto para el mes de marzo, el aforo presencial será del 100%, siempre y cuando las condiciones sanitarias lo permitan.
5. Las autoridades universitarias mantendrán un estrecho contacto con los gobiernos estatal y federal, de tal manera que atenderán las recomendaciones de los expertos del Comité de Salud Pública, epidemiólogos y la propia Secretaría de Salud de Yucatán (SSY), para continuar con las medidas necesarias para evitar que se propaguen los contagios de Covid-19.
La Universidad Autónoma de Yucatán reconoce la importancia de generar las condiciones para un regreso seguro a clases presenciales, en beneficio de los más de ocho mil 500 estudiantes del nivel bachillerato que forman parte de esta gran comunidad universitaria.