La lluvia se hizo presente en la zona arqueológica de Chichén Itzá e impidió que el juego de sombras, donde desciende Kukulcán, se aprecie en la pirámide maya.
Este 22 de septiembre inició el otoño en el hemisferio norte y se esperaba que “Kukulcán” se diera cita en una de las Nuevas Maravillas del Mundo Moderno, pero no fue así.
Cabe señalar que la zona arqueológica al oriente de Yucatán no permitió el ingreso de visitantes, como medida contra el Covid-19 por segundo año consecutivo.
Información de Con Acento.